Factores físicos

Las crías, los animales enfermos y aquellos que hayan sido sometidos a cirugía tienen una fuerte preferencia por temperaturas ambientales ligeramente elevadas y les gusta tener un lugar para esconderse.

La humedad y la frecuencia de ventilación

Los animales también son sensibles a grandes fluctuaciones en la humedad y la frecuencia de ventilación; los problemas respiratorios y la cola anillada se asocian a una humedad relativa alta y baja, respectivamente. Se deberán evitar valores altos y bajos de humedad relativa del aire, así como el cambio rápido de un valor a otro.

Ultrasonidos

Además, las ratas son muy sensibles a sonidos de alta frecuencia (ultrasonidos). Hay que evitar este tipo de ruido, especialmente cuando los animales estén descansando. En las habitaciones de los animales hay equipos electrónicos que pueden generar este tipo de alteraciones. Las ratas albinas son particularmente sensibles a la luz. La intensidad lumínica no debe superar un máximo de 60 lux en el entorno de estos animales.

Cola anillada como patología